La Zoysia sp conjuga una gran calidad estética, alta sostenibilidad y fácil manejo por lo que su uso es cada vez más extendido principalmente en jardinería y campos de golf.
Es una Variedad C4 (de clima cálido) por lo que comparte características con otras C4:
• Alta tolerancia al calor.
• Alta tolerancia a la sequía
• Mayor tolerancia a enfermedades que variedades C3
Por otro lado, posee unas características especiales que la diferencian respecto a otras variedades de clima cálido:
Baja necesidad de Siegas
Se estima unas necesidades de siegas del 50 % respecto a los céspedes convencionales como Festuca, Rye Grass, Bermuda etc.
Dependiendo de la especie la altura de corte puede variar desde 2mm en las Zoysia Ultradwarf Lazer (greenes) a los 50 mm para la Zoysia japónica Empire.
Algunas zoysias de golf como la Z. Trinity ( L1F) permiten alturas de cortes muy diversas por lo que se les puede dar un uso Tee to Green.
Menor necesidad de fertilizantes
Las necesidades de nitrógeno son de un 40-60 % respecto a variedades de Bermuda o festucas.
Mayor resistencia a Plagas
Mas resistente a plagas de insectos que los céspedes convencionales debido a su hoja lignificada, por lo que disminuye notablemente el uso de insecticidas.
Mayor tolerancia a la sombra
Soporta bien la sombra de árbol y es más tolerante a la escasez lumínica que otra variedades c4. Especies como la Z. Zeon Se comporta bien con solamente 3- 4 horas de luz directa al día.
Menor consumo de agua
Algunas especies de Zoysias de crecimiento lento necesita menos agua, alrededor de 60-80 % respecto a otras c4. De todas formas, dependerá del tipo de mantenimiento y la fertilización que estemos aplicando.
Dormancia
Algunas variedades de Zoysia como la Z. Zeon , Z. Geo o Z. Trinity Entra en dormancia más tarde que las especies de Bermuda y paspalum por lo que mantiene el color verde durante más tiempo.
Para poder sacar partido a todas estas ventajas es necesario un sencillo pero correcto mantenimiento. Los aspectos más importantes del mantenimiento podrían resumirse en:
- Controlar el thatch en primavera, cuando la planta empiece a activarse, mediante escarificado o siegas bajas.
- No fertilizar con grandes cantidades de nitrógeno en una sola vez.
- No aplicar mas agua de la necesaria.
- Si fuese necesario tratar con fungicida preventivo en otoño
Uno de los efectos indeseados de un mal mantenimiento es la aparición de enfermedades fúngicas, especialmente Rizoctonia.
La Rizoctonia es un género de hongo que puede causar varias enfermedades en las plantas, incluyendo el césped de Zoysia. Uno de los problemas más comunes es la “Rhizoctonia Large Patch” causada por la Rizoctonia solani. Normalmente ocurre en otoño o al principio de primavera.
Los síntomas típicos de la infección pueden incluir:
- Parches marrones: Áreas circulares de césped afectado que se vuelven marrones, con bordes más oscuros y un centro más pálido.
- Textura anormal: El césped afectado puede tener una textura irregular, a menudo más delgada y débil que el césped sano.
- Bordes difusos: Los bordes de los parches pueden ser borrosos y mal definidos, lo que puede hacer que la infección se propague fácilmente.
Para manejar problemas de la Zoysia con la Rizoctonia, aquí hay algunas medidas que puedes considerar:
- Aireación del suelo: La aireación regular del suelo puede ayudar a mejorar el drenaje y reducir la humedad en el césped, lo que dificultará el crecimiento de hongos.
- Controlar el Thatch o colchon. Crea una capa hidrófoba que genera condiciones de humedad propicias para el desarrollo de la enfermedad.
- Fertilización adecuada: Proporciona la cantidad adecuada de nutrientes para el césped. Un césped saludable es menos susceptible a las enfermedades.
- Manejo de riego: Riega temprano en la mañana para permitir que el césped se seque durante el día. Evita el riego excesivo y el encharcamiento.
- Fungicidas En casos de condiciones adversas se puede considera la aplicación de fungicidas preventivos. Debe hacerse en septiembre-octubre. Es recomendable 2 tratamientos con fungicida de amplio espectro como azoxistrobin a dos repeticiones de 0.5 kg/ha. Espaciados 15 días. En el caso de que la enfermedad apareciese se debería aplicar también en primavera.
La fertilización adecuada es esencial para mantener un césped de Zoysia saludable y vigoroso.
Algunas pautas generales para la fertilización de la Zoysia son:
Análisis del suelo: Se puede realizar un análisis de suelo para determinar los niveles de nutrientes presentes en tu suelo. Esto te ayudará a saber qué nutrientes son necesarios y en qué cantidad.
Fertilización equilibrada: Utiliza un fertilizante equilibrado que contenga una proporción adecuada de nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), junto con otros micronutrientes.
Aplicaciones a lo largo del año: Abonar en primavera y verano coincidiendo con la etapa de mayor crecimiento del cesped:
- Primavera: En la primavera, utiliza un fertilizante con una proporción ligeramente mayor de nitrógeno para promover el crecimiento y el color verde intenso.
- Verano: En verano cambia a un fertilizante con una proporción más equilibrada de nutrientes, que favorezca el desarrollo de raíces y el almacenamiento de nutrientes para el invierno. No es recomendable parar de abonar con nitrógeno a partir de finales agosto.
Evita el exceso de nitrógeno:. Evita aplicar demasiado nitrógeno de una sola vez. Las necesidades de nitrógeno de una zoysia son de alrededor de 150 ud/ha y año.
Considera fertilizantes de liberación lenta: Especialmente en verano. En primavera se puede realizar un primer tratamiento con fertilizantes de acción rápida para un rápido green-up. Los fertilizantes de liberación lenta proporcionan nutrientes de manera gradual a lo largo del tiempo, reduciendo la posibilidad de sobrealimentación y minimizando los picos de crecimiento.
Tal y como hemos visto, con un manejo sencillo de nutrición y riego acompañados de un correcto mantenimiento podemos tener un pradera de Zoysia de alta calidad que nos ofrecerá unos beneficios, medioambientales, sociales y empresariales:
- Alta sostenibilidad.
- Bajas necesidades de input.
- Ahorro económico.
- Menor huella de carbono.
- Menor huella hídrica
- Mayor durabilidad.
- Menor efecto contaminante.